Dibujo para colorear

El objetivo de esta actividad de escritura es ajustar la presión de la mano (con y sin lápiz). De este modo, el niño aprende a notar e identificar conscientemente los distintos niveles de presión, tanto al dibujar y escribir como al hacer huellas dactilares. ¿Qué presión necesita la mano para estar relajada? ¿Cuándo hay que tensar la mano? Averigüe con su hijo cuál es la presión óptima. El estímulo dirigido a la adaptación de la presión contribuye a la fluidez en la escritura, mejora la calidad de la misma y alivia la presión sobre la mano y las articulaciones de los dedos.

Material necesario

Lápices de colores, almohadillas de tinta o acuarelas, plantillas impresas (véanse los recursos más abajo).

Recursos para imprimir

Cómo jugar

Empieza seleccionando los colores con los que quieres dar vida a tu dibujo. A medida que colorees el dibujo, experimenta con diferentes cantidades de presión.

Dale un toque personal a tu obra diseñando el fondo. Ya sea un paisaje sereno, una ciudad bulliciosa o un fondo abstracto, deja volar tu imaginación.

Toda obra de arte merece un nombre. Escribe el título de tu creación directamente sobre el cuadro, variando la presión con la que escribes cada letra. Esto añade un elemento artístico al proceso de nombrar y hace que tu obra de arte sea aún más única.

Variaciones

  1. Aplica una presión suave para los colores más oscuros y aumenta la presión para los tonos más claros.

  2. ¡Ponte creativo con el arte de las huellas dactilares! Utiliza almohadillas de tinta o acuarelas para crear diferentes huellas dactilares alrededor de tu dibujo único. Prueba a utilizar varios dedos y aplica distintos niveles de presión al presionar los dedos sobre el papel.